Garantizar la excelencia en los proyectos para minimizar fallas se ha vuelto crucial en la actualidad, lo que implica llevar a cabo pruebas y ensayos que salvaguarden la inversión realizada. El control de calidad juega un papel fundamental en las obras de gran amplitud, ya que su omisión puede acarrear la pérdida de materiales e incluso desencadenar graves problemas ambientales.
En el siguiente artículo abordaremos la importancia de las pruebas de calidad en el mundo de las geomembranas y conoceremos cuáles son las distintas pruebas de calidad para garantizar la confiabilidad y el rendimiento a largo plazo en tus proyectos.
En el ámbito de la impermeabilización y el aislamiento, las geomembranas se han convertido en elementos esenciales para prevenir la filtración de líquidos y proteger el medio ambiente. Su uso es cada vez más frecuente en proyectos de gran amplitud, como vertederos, embalses, canales de riego y estructuras de contención.
Sin embargo, la inversión en estas láminas impermeables puede verse seriamente comprometida si no se implementa un control mediante pruebas de calidad durante el proceso, desde la selección del material hasta la instalación final.
Detectar correctamente fallas en las geomembranas pueden prevenir consecuencias desastrosas, tanto económicas como ambientales. Las principales razones para implementar un control de calidad riguroso son principalmente reducir pérdidas económicas, daños ambientales que afecten a la biodiversidad y el entorno natural, e incluso mitigar riesgos para la seguridad pública. Es por ello que realizar pruebas de calidad exhaustivas y precisas se vuelve fundamental para garantizar la eficacia y durabilidad de los proyectos que involucran geomembranas.
Estas pruebas se realizan sobre muestras de geomembrana y tienen como objetivo evaluar las propiedades mecánicas del material, como la resistencia a la tensión, al desgarro, a la punción y a la cizalla. Entre las pruebas destructivas más comunes se encuentran:
Esta prueba de tracción es crucial para determinar la resistencia máxima que puede soportar una geomembrana antes de romperse, lo que proporciona información valiosa sobre la durabilidad y la calidad del material. Al analizar los resultados de esfuerzo-deformación obtenidos durante esta prueba, se puede evaluar con precisión el comportamiento elástico y plástico de la geomembrana, lo que ayuda a garantizar su eficacia a largo plazo en proyectos de impermeabilización y protección ambiental.
Separación por pelado
Las pruebas no destructivas son fundamentales para evaluar la calidad de las geomembranas sin comprometer su integridad. Entre las pruebas más utilizadas se encuentran:
Esta prueba se basa en la presurización del canal de soldadura, el espacio que queda entre dos cordones de soldadura tras la unión de láminas de geomembrana. Se utilizan dos métodos:
Esta prueba consiste en aplicar una presión negativa sobre la soldadura mediante una campana de vacío. Si hay fugas, se producirá una succión notable en la zona defectuosa. La caja de vacío es particularmente útil para detectar fugas pequeñas que podrían pasar desapercibidas con la prueba de aguja o aire.
Esta prueba aprovecha la conductividad eléctrica de las geomembranas para detectar discontinuidades en las soldaduras. Se utiliza un chispómetro que emite una pequeña chispa eléctrica al recorrer la soldadura. Si hay fallas, la chispa saltará, indicando la presencia de un punto débil o una fuga.
En LDM, entendemos la importancia de la calidad de los materiales. Por eso, ponemos a tu disposición geomembranas de la más alta calidad, cuidadosamente seleccionadas y sometidas a un estricto control de calidad que garantiza su durabilidad, eficacia y, en última instancia, la protección del medio ambiente en todos tus proyectos. ¡Contáctanos para recibir más información y descubrir cómo podemos colaborar juntos para lograr el éxito en tus proyectos!
Referencia:
https://blog.cesla.la/es/importancia-de-las-pruebas-de-calidad-en-soldadura-plastica